Post de Teresa AntónCuando anunciaron en los upfronts del año pasado que CBS iba a traer una serie de genios que ayudan a Seguridad Nacional, tal como la describía me imaginé algo parecido a una mezcla entre El Mentalista y Bones donde el protagonista (una especie de Sherlock) fuera capaz de explotar su cerebro en límites insospechados. Decidí comenzarla pero como no tenía tiempo la dejé para el fin de semana. ¿Y qué pasó? Que empezaron a lloverle malas críticas por ser una serie de mucha acción y poco uso mental. Al parecer no fui la única que pensó que iba a ver una serie difícil de seguir que te hiciera pensar, y ese primer capítulo se parecía mucho a Fast & Furious (con coches incluidos). Tras leer las críticas mi concepto de la serie cambió y un día que andaba cansada y no me apetecía ver nada serio la probé, y me gustó. Pero ¿qué pasó? Que empezó a volverse repetitiva, sí los casos eran muy diferentes pero les faltaba el carisma de los de Navy, la forma de resolverlos era muy parecida, los actores no eran muy buenos y los personajes resultaban poco carismáticos. Poco a poco se fue quedando en el fondo de mi baúl y no la retomé hasta que vi que se iba a estrenar la siguiente temporada. Al poco de comenzar la nueva etapa llegué a una conclusión: nada había cambiado. Todo empezaba a ser cansino y los pocos capítulos que estaba viendo me cansaban pero había algo que podía salvarla. ¿Qué podría salvar a una serie que sigues para cuando estás off y solo quieres desconectar? El humor. Como toda serie (drama o no) había tenido algún pequeño toque de humor, pero pasaban demasiado desapercibidos. Lo que hace que los procedimentales policíacos no sean tan tediosos es la pizca de humor justa para animar al espectador. El problema está en que no cambiaban su fuente de ¿humor? si se podía llamar así hasta que llegó Ray. Un personaje completamente diferente que al parecer se va a quedar en el grupo. Es el robaescenas típico que sale mínimamente para sacarte una sonrisa, como un comentarista humorístico de la serie. Y ahora que ya tenemos un resumen de lo que parece lo único que puede salvar esta temporada de Scorpion os dejo la reseña del 2x05. ¡Disfrutadla! Review 2x05El capítulo comienza añadiendo un poco de drama (aún más a esta serie) con la enfermedad de la hermana de Walter. Su enfermedad ha empeorado y tienen que operarla. Como siempre su hermano no anda por ahí (no entiendo su relación a veces parece que está muy pendiente de ella y otras es como si no tuviera hermana). El que sí anda por ahí es Sylvester su nuevo ¿novio? (¿es que no son un poco mayorcitos para no haber definido su relación?) que anda, como siempre, estresado. Pero bueno, no nos quejemos tanto que al fin sale algo más la hermanita ya que en la temporada pasada ella estaba también en Happyland (¡¿por qué la cancelaron?!) pero esta temporada solo está en aquí y no aparecía. Y entonces, cuando empieza el momento dramático, con música de violines y lágrimas en los ojos (a no que en esta serie no hay emoción alguna, me he equivocado), ella le pide que esté allí cuando despierte para estar tranquila, él se lo promete y todos los espectadores vemos que ese será el problema ¿emocional? del capítulo. Y, cómo no, el hermano no sabe que a su hermanísima la van a operar. Y hay que ocultárselo ¿¿¿¿por???? Eso es algo que descubriremos en el próximo episodio (no lo sabremos nunca, no os liéis). A lo que íbamos. Toby sigue en su línea de "quiero ser Travis Maddox" y Cabe le entrena en boxeo. ¡Di que sí! Y entonces llega Happy a quitarle su ilusión lanzando naranjas a las paredes. Todo muy normal entre genios. Y ¡por fín! se dan cuenta que el garaje donde trabajan es una mierda pero su solución es hacer unas reparaciones, perdón Ray-paraciones. Y se ve claramente que dejarselo a Ray es una mala, malísima idea pero como son tontos no se dan cuenta. Ah, no, espera, que se supone que son genios ¿y entonces porque dejan que R lo arregle? ¿No tenía uno de ellos un CI mayor que Einstein? Y como toda serie frente a lo último que conversan sale el caso, aquí como al guionista no le apetecía enlazar ha decidido traer a la nueva jefa a solucionarles sus problemas de dinero con un nuevo trabajo. Pausa. De todos los "jefe" que han tenido esta es la única que no me convence en absoluto. ¿No había nadie más insulso? ¿Era para que no quedaran tan mal los protagonistas? Y se infiltran como actores de una película sobre Super Fun Guy. Sylvester está emocionado (es el único) hasta que adelantan la cirugía, primer problema. Así que va a hablar con Walter y entonces le dice: “no puedo ir pero no puedo decir por qué”. Y Walter, como todo genio que siempre quiere saber más y ampliar sus conocimientos dice: ---. Ups, no dice nada ¿has oído hablar de la curiosidad? Y aquí, se van de viaje y se encuentran con el tío más sospechoso del mundo que les miente diciendo que es un buscador de localizaciones y solo le falta un cartel con luces de neón donde ponga ¡SOY EL ENEMIGO! Pero nuestros genios (entre ellos un psicólogo experto en analizar el comportamiento del ser humano) no se enteran de nada. Mientras pasan de su enemigo en sus narices deciden meterse con los superhéroes (¿disfrazados para cuándo?) haciendo llorar a nuestros amigos de DC y Marvel. Es entonces cuando el buscador de localizaciones aparece en la puerta de su casa y lo dejan entrar (¡idiotas!) Y resulta que les ha pillado porque no saben aparentar un rodaje falso (oks ¿porque a veces son mega meticulosos con los detalles y otras veces cometen fallos de principiante como no enchufar el micro a algo?) Por suerte lo esquivan pero se enteran que la NS les ha dejado colgados. Entonces Happy se infiltra para robar ácido y en el camino pierde los pantalones delante de Toby (Lucky guy). Y el siguiente gran paso en la misión es… ¿quién iba a decirlo? Colarse vestidos de superhéroes. Y como todo es muy normal en la serie, mientras destruyen el titanio del misil nuclear crean sin querer gas de la risa, ¿en serio? Mientras huyen en una persecución de coches, algo fijo en todos los capítulos, deciden que hay que mandar un selfie a la OTAN, todo muy normal. Y mientras tanto son idiotas y tiran el ácido y su solución: disparar el misil ¡Di que sí! Así que mientras tanto en LA Sylvester y Ray montan una carrera a la OTAN para salvarlos pero como han dejado al chico sin neuronas conducir terminan en la OTAN equivocada. Por otro lado se disponen a lanzar el misil nuclear a una mina abandonada. Y a Walter nadie le enseña a mentir así que les dice a la cara que puede que explote una bomba nuclear a sus pies. Pero no hay problema, él confía en sus habilidades. Así que disparan y...no sé si han disparado un cohete o el Delorean. Ese misil es tan falso como sus disfraces Y aparecen los malos donde Toby demuestra que funcionaron las clases de boxeo. Así que en cuanto se libran fácilmente (MUY fácilmente) de los malos. Aparece la OTAN a rescatarles y al verles con esas pintas deciden que salvarían mejor a su país dejándolos ahí. Es broma, los rescatan y no comentan nada. Y Megan despertó de la cirugía y Sylvester estaba ahí. Con Ray. Que se vuelve todo majo y decide mentir por su nuevo amigo, Walter Sylvester te roba la hermana y los amigos ¡cuidado! Ray decide que quiere pertenecer a Scorpeon, diría scorppeon, ¡como sea!
Mientras tanto Toby y Gabe también se han convertido en friendly friends ¿el capítulo se llamaba amistad? Y deja colgada a Happy por Gabe. Mientra Walter sigue en la línea de ligoteo penoso con Paige, que tiene que salir en cada episodio. Y se entera que Clark Kent no se queda con la chica porque no podía salvar el mundo y estar con Lois, ya sabes tu futuro.
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