Post de Rosana Rábago¡Buenos días, seriéfilos! Por fin ha llegado el día en el que podré fangirlear como nadie lo hace con dos de mis series favoritas: The Flash y Arrow, que volvieron el martes y el miércoles respectivamente a The CW con sus nuevas temporadas. ¿Empezamos? ¡Aviso desde ya que hay grandes spoilers de ambas series! The Flash Comenzamos el capítulo con un Flash en plena forma luchando contra el Capitán Frío y Ola de Calor y venciéndolos con la ayuda inestimable de Firestorm. Hasta aquí todo bien, ¿pero qué hace Eddie en la escena, y Wells? Es ahí cuando nos damos cuenta de que estamos presenciando un precioso sueño de Barry. Sin embargo, hay que volver a la realidad. Y hasta allí nos llevan. Han pasado seis meses desde la Singularidad y todo Central City está expectante por agradecer a Flash en el Flash Day. ¿Todo el mundo? A, no, que Barry está en plan Ollie en la primera temporada intentando hacerlo todo por su cuenta… ¿Por qué? La razón nos llega cuando nos enteramos de que para cerrar la Singularidad Flash necesitó de la ayuda de Firestorm y que solo uno de sus dos inquilinos (Ronnie y el doctor Martin Stein) sobrevivió… ¿Adivináis quién? En efecto, el pobre Ronnie fue el que no salió con vida en este episodio (aunque, teniendo en cuenta su historial de muertes y resurrecciones, yo no descartaría que el personaje volviera a hacer de las suyas). Pero bueno, sigamos. Tras unas charlas con Joe (que le ha conseguido un trabajo a Cisco en la comisaría de policía) e Iris, el corredor escarlata decide (en el último momento) presentarse al Flash Day. Y ahí es donde recibe el ataque de… ¿un muerto con capacidad de absorber toda la energía nuclear que encuentra? Pues sí, y Barry decide hacerse cargo de él por su cuenta. Pero sus amigos no están por la labor de dejarle hacer eso, así que se presentan en S.T.A.R. Labs (que Wells le había dejado a Barry como herencia) e intentan ayudarlo. Pero Barry es cabezota y se deja el auricular en el laboratorio a propósito (mala idea, Barry, muy mala idea). Tras recibir una paliza de parte del Aplastador Nuclear (y no, el nombre no se lo pone Cisco sino el Doctor Martin Stein), regresa en muy mal estado a los laboratorios. Ahí nos meten un flashback en el que Joe le dice a un Barry niño que está bien que esté triste por lo que le sucedió a sus padres pero que tiene que volver a comer. Y como siempre, Barry adulto se levanta con papi Joe a su lado diciéndole el “Te tengo” que también le digo ya hace 14 años y que tanto ayudó a Barry entonces. Tras esto, Joe le advierte de que no le va a dejar trabajar solo porque así solo busca que le maten y que debe dejar de culparse por lo que pasó hace seis meses, ya que no solo fue culpa suya, sino de todos los que estaban allí también tienen parte de culpa. Una vez acabada la charla somos testigos de como Barry va a ver a Caitlin, que ahora está trabajando en Mercury Labs, y cuando ella admite que no le echa la culpa a Flash de lo que pasó con Ronnie sino a ella misma, Barry le entrega un pañuelo con lo que se le cae una USB que el abogado de Wells le había dado a él con órdenes directas de que solo él podía verlo (de hecho, el artefacto es tan listo que le mandará al abogado una confirmación cuando Barry haya visto el vídeo entero). Es ahí cuando se produce el momento mágico, pues Wells confiesa en el vídeo que asesinó a Nora Allen y eso le permite al abogado de Henry ponerlo en libertad. Pero, antes de que vaya a liberar a su padre, hay un metahumano del que hacerse cargo. Y, finalmente, Barry le pide ayuda al resto del equipo. Entre todos (y gracias de nuevo al genio del Doctor Martin Stein) consiguen vencer al metahumano que, en sus últimas palabras, asegura que fue Zoom el que mandó matar a Flash. Pero, el problema con Zoom queda para otro capítulo porque hay que ir a sacar a Henry a la cárcel y allá va Barry con toda la alegría de ver a su padre con él de nuevo tras catorce años en la cárcel. No obstante, esa felicidad le dura poco, pues el padre le dice durante la fiesta de bienvenida que le han organizado todos que va a marcharse de Central City para permitir a Barry ser el héroe que está destinado a ser como The Flashsin tenerse que preocupar siempre por él. Tras llevar a su padre a la estación de tren, Barry regresa a S.T.A.R. Labs donde se encuentra con su segundo padre (aka Joe) y con el resto del equipo que le presentan el nuevo traje de The Flash y aseguran que las instalaciones vuelven a ser completamente seguras y que nadie entrará sin que ellos lo sepan. En ese momento aparece una sombra llamando a Barry (¡Qué poco ha durado esa seguridad, ¿eh, equipo Flash?!) que, tras ser amenazado, asegura ser el primer Flash aka. Jay Garrick, del que ya pudimos ver su casco en el final de la primera temporada. ¿Qué pasará con él y con Zoom? ¡Habrá que esperar al martes 13 de octubre para averiguarlo! Mientras tanto, hablemos de la otra serie DC que regresó el miércoles y disfrutemos del trailer del 2x02 de The Flash: Arrow ¡Por fin ha vuelto mi Ollie! Tras largos meses de espera interminables (hasta parecía que estaba en Lian Yu), Oliver Queen y su equipo han vuelto a la carga en Star City (antes conocida como Starling City) para ofrecernos la mejor premiere de temporada que se ha visto desde la primera de Arrow. Comenzamos el capítulo como no podía ser de otra manera con Oliver corriendo entre la maleza. Solo que esta vez no escapa de nadie ni va en la búsqueda de su rescate. Esta vez se dirige a su nueva casa con Felicity, donde ella le espera preparando el desayuno. Es ahí cuando vemos un diálogo cómico más propio de The Flash que de Arrow en el que Ollie le suelta a Felicity un “you have failed this omelette” haciendo alusión a una de las frases características de la serie (“you have failed this city” que algún día pondremos en las frases seriéfilas de la semana). Sin embargo, Ollie es un caballero y acaba haciéndole el desayuno a ella con beso de par de mañana incluido. Y tras el beso, llega el sexo mañanero. En el que descubrimos que, efectivamente, Ollie se ha hecho quitar el tatuaje que llevaba en honor a Shado, ya que no lo necesita al estar enamorado de Felicity. Pero no todo es de color rosa en la serie. Tras quedarnos claro que la reciente pareja Olicity tiene visita para comer de sus vecinos al día siguiente, somos testigos de una persecución protagonizada por Speedy, Black Canary y Diggle que están intentando parar a los que han llamado como los “Ghosts”. Pero, como siempre, no son capaces de hacerlo solos. Así que, tras una amenaza lanzada por el nuevo big badass de la temporada, Damien Dark, al consejo de gobernación de Star City (en esta escena debo mencionar la alusión de Lance a Central City y su Flash Day), Laurel y Thea deciden ir a pedirle ayuda a Ollie sin contar con la aprobación de Diggle (que aún no ha sido capaz de perdonarle a Oliver que raptase a su mujer seis meses atrás) y a ello van. Mientras están ambas de viaje, la feliz pareja tiene una comida con sus vecinos en la que nos enteramos que Ollie va a proponerle matrimonio a Felicity esa misma noche y en la que vemos el anillo que le regalará, perteneciente a Moira. Pero, antes de eso, tenía que haber un momento de Felicity incómoda y, efectivamente, llega cuando ella sale corriendo a por las mimosas. Tras este momento incómodo para todos (excepto para aquí los súper vecinos), pasamos a la proposición. Propuesta que no se lleva a cabo porque aparecen las otras mujeres en la vida de Oliver (ósea, su hermana Thea y su exnovia y mejor amiga Laurel Lance) y entre ellas y Felicity consiguen que Ollie vuelva a Star City para ayudarles a vencer a los “Ghosts”. Y allá que van. Mientras tanto, en los flashbacks, todo lo que vemos es cómo Ollie escapa a Coast City donde le encuentra Amanda Waller que le dice que abrace su oscuridad en lugar de evitarla. Tras esto, le droga y de vuelta a Lian Yu. Dicho esto, regresemos al tiempo presente. Ollie y Felicity ya han regresado a Star City y se reúnen con todo el equipo en la guarida provisional. No todo el mundo recibe con los brazos abiertos a Oliver (Diggle sigue y seguirá unos cuantos capítulos enfurruñado) pero las cosas parece que funcionan. ¡Ah, no! Que resulta que es ahí cuando Oliver descubre que Felicity, que se ha adaptado perfectamente a su regreso, estaba ayudando al equipo sin que él lo supiera. Lo que no sienta nada bien al pobre Ollie… Pero él es incapaz de estar enfadado mucho tiempo con ella y tras un intento de hacer las cosas a su manera, Ollie entra en razón y se pone su nuevo traje, cortesía de Cisco, para pelear y enfrentarse de una vez por todas a Damien Dark y a los “Ghosts” que éste dirige (también conocidos como H.I.V.E.). Pero, la decisión de quedarse no la toma solo, ya que nuestra Felicity siempre está ahí para ayudarle y ya de paso decirle que se aburre como una ostra en esta nueva vida y que quiere quedarse para ayudar al equipo. Así que una vez tomada la decisión, toca enfrentarse al terrible Damien Dark, en una pelea en la que ninguno de los dos gana, pero descubrimos que aquí Damien tiene el poder del misticismo… y tras la que, mientras Damien se cura sus heridas, somos testigos de como ¡Lance trabaja para H.I.V.E. y Dark también! Pero bueno, la cuestión es que Ollie decide quedarse y para ello no puede volver a ser Arrow, así que se les ocurre la genial idea de grabar un (llamémosle) anuncio publicitario para darse a conocer con un nuevo alias, el mismo que da nombre al capítulo de la premiere de la cuarta temporada, ¿lo adivináis? En efecto, ¡¡¡Green Arrow!!! Pero aquí no acaba el capítulo. Pues este episodio nos lleva a seis meses tras los acontecimientos ocurridos en Green Arrow y ahí podemos ver a Ollie junto a una tumba a la que acude Barry pidiéndole perdón por no haber llegado antes, a lo que nuestro arquero esmeralda contesta que no pasa nada, que entiende que era Zoom el que le impidió llegar… ¿Quién será el muerto de la tumba que hará a Oliver volver a plantearse todo? ¿Qué pasará para que esa persona pase al otro barrio? ¡Habrá que esperar para averiguarlo, y mientras tanto, seguir viendo Arrow el próximo miércoles 14 de octubre! ¡Yo no me lo perderé!
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Junio 2017
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