Post de Naiara Salinas Bien está lo que bien acaba. Y, pese a mi dura crítica hace semana y media sobre el rumbo que estaba tomando Juego de Tronos (repito, mi serie favorita), he de decir que la season finale, sin ser perfecta ni la mejor de todas, me satisfizo en varios aspectos. Así que aquí vengo a enumerar una lista de mis momentos favoritos, en orden de menos a más (osea que mi top 3 está al final): 1. Mega reunión ¿Tener la oportunidad de ver en un mismo plano a los tres últimos Lannister, la Reina Dragón, el "bastardo" de Invernalia y los Greyjoy? Las cuatro grandes casas que quedan. Pero no solo eso: el reencuentro entre Brienne y el Perro, entre Pod y Tyrion, entre Tyrion, Pod y Bronn, entre Jaime y Brienne... ¡Demasiado para el corazón! Los diálogos y la aparición motherfucker de Daenerys lograron que por una minuto perdonara a los guionistas por los errores del pasado (y Euron, lol, su reacción al ver al caminante blanco no tuvo precio). Este encuentro no podía evitar, naturalmente, las chispas que saltaron entre varios. Si bien, pese a la tensión palpable, todo se resolvió limpiamente y sin muertes. Hum..., quizá hubiera estado bien una trampa por parte de Cersei, no tanto a lo fuego valyrio en el Septo de Baelor, pero sí una encerrona. Habría sido impresionante (aunque su traición al pacto posteriormente me hizo alzar las palmas. Esta es la villana que yo quería). 2. Jaime toma la decisión correcta (para variar) En este episodio la referencia al valonqar fue más acusada que otras veces, todo por el encuentro a solas de Cersei con cada hermano. Los autores no perdieron ningún momento en establecer una conexión entre ambos, por medio de un paralelismo en su discusión donde la reina leona llegó a amenazar a los dos de forma muy similar (vía la Montaña). Eso no solo me hizo gracia (su punto irónico tiene), sino que además me pareció una buena forma no solo de que Jaime "rompiera" con ella, sino de que también Tyrion la observase con nuevos ojos al salir vivo de ahí. La fuga del primero tiene su momento cuando advierte la nieve cayendo sobre la capital por primera vez. Era algo que se veía venir tarde o temprano, pero no por ello dejó de ser una escenaca (me refiero sobre todo a su ruptura con Cersei. Lo malo es que ya todo apunta a que será él el destinado a poner fin a su vida (¿o puede que sea una colaboración entre Tyrion y él?). Y cuando se cubre la mano de oro con un guante ya lo sabemos con certeza: este chico ya no siente el orgullo de llevar el apellido de su hermana ambiciosa. 3. Theon POR FIN demuestra estar hecho de hierro Un amigo mío que adora la serie describió este momento como un combate pokemon (badum tss). Sinceramente, esa escena no es como yo la hubiera escrito, pero aun así me pareció genial que el chico decidiera espabilar por fin y hacer uso de la lealtad y agradecimiento que siente hacia Yara. Era obvio que solo rescatándola podía redimirse. Primero está el diálogo inspirador con Jon (no sé si es porque ha pasado mucho tiempo o porque el chico ha sufrido demasiado llegados a ese punto, pero yo al Nieve le vi muy blando ahí. Sé que no tiene sentido guardar rencor a alguien que está en su bando, pero tampoco me esperaba que de repente fuesen a tratarse casi como los hermanos adoptivos que fue cada uno con Robb) y luego el enfrentamiento contra uno de sus hombres, que enseña a Theon que a veces no tener pelotas es una ayuda (badum tss). 4. Jonerys se consuma Ya por el título era de esperar que algo importante sucediera entre estos dos, y hubo decepción aquí. La parejita ya ha pasado por un rifi rafe inicial, momentos de tensión y shippeo entre fans y secundarios. Solo les quedaba dar rienda suelta a su amor de una vez, y aunque de momento solo ha habido rollo de una noche, fijo que la relación se afianzará más en los próximos episodios. La cuestión es... ¿cuánto les durará el buen rollito hasta que Bran-Vieja Al Visillo se lo corte en dos palabras? ¿Y qué pasará después? ¿Sentirán asco? ¿Trauma? ¿No podrán hablarse o verse en un tiempo? ¿Le harán caso omiso y seguirán a lo suyo? Con seis capítulos poco tiempo tienen para darse un momento de descanso... Por cierto, qué grande lo del verdadero nombre de Jon; es una de las cosas que no vi venir jamás. Buena referencia a los libros y esa parte que acusé de haber omitido, ejem. 5. Un flashback sorpresa Ya que hablo de Jonerys, recapitulemos cómo se elaboró esta escena. Sam Sagaz decidió mostrarse en Invernalia (actualmente el sitio más seguro del mundo, ya sabéis) sin avisar (¿cómo le dejaron pasar sin más?) para ir a buscar al benjamín sin sangre de la familia (¿quería asegurarse de que estaba bien? Curioso momento para convertirse en canguro) y a este no se le ocurrió otra cosa que ponerse a marujear sobre el linaje de Jon (¿para qué contarle esta info a sus dos queridas hermanas a las que conoce de años cuando puede hacerlo con un tío al que solo ha visto una vez en su vida? Ah, ya: una podía usarla para obtener el poder mediante un levantamiento y a la otra seguramente le rompería el corazón. Por si alguien lo dudaba). Los ya nombrados "cuñaos" oficialmente hablaron del tema. Sam le robó a su novia su descubrimiento y Bran puso cara de "OH, HELL NO, tú no vas a saber más que yo". En cuestión de segundos el tullido dirigió su silla de ruedas cual ferrari al arciano más cercano y se fue a inspeccionar el pasado (aunque supuestamente ya lo había aprendido todo antes de salir de la cueva de Más Allá del Muro) para ver a la tía Lyanna y, al ahora también tío, Rhaegar declarándose amor eterno a ojos de los dioses antiguos y nuevos. Una escena que yo no esperaba hasta la siguiente temporada, la verdad, y que no solo me hizo aguas en los ojitos sino que a la vez me llevó a comparar su relación a la de Daenerys y Jon, que justo estaban dándose el lote en un barco mientras Bran se lo contaba todo a Sam. Bonito, armónico, sencillo... No se compara al impacto de otras revelaciones (como la del origen de Jon la pasada temporada, aunque tampoco fuese una sorpresa), pero fue un gustazo verlo. 6. Se hizo justicia (bye, bye, Meñique) Y llega el segundo mejor momento de la madrugada (bueno, para mí): cuando las hermanas Stark jugaron muy astutamente al engaño y lograron que el menor de la región de Dedos bajara la guardia. Yo como espectadora ya estaba crucificando a Sansa, no creyendo que fuese a caer en la trampa de Baelish, cuando de repente se me ocurrió: "Espera, ahora es aquí cuando esto da una vuelta de tuerca, por favor", y efectivamente así fue. Genial cómo ella y Arya mantienen el diálogo lo bastante neutro como para que nadie se percate hasta el último segundo, cosa que además, de cara al público, está muy lograda a través del montaje y el enfoque en lo que hace Sansa en lugar de su hermana (porque, claro, veíamos difícil que Arya fuese a traicionarla, ¿pero ella, para proteger su piel? Hum). Esta escena no solo me devolvió el aroma de los plot twist que estaba empezando a echar de menos, sino que además me dejó con un sabor agradable por la intervención de sus protagonistas. Dejando a un lado a las lobas, Bran se marcó un puntazo para terminar de delatar a Meñique, y la forma en que este, que durante todas las temporadas se había mantenido de lo más calmado, pierde la compostura es sublime. Genial actuación por parte de todos (*aplaudo*). 7. La caída del Muro Cuando el invierno ha llegado a Poniente, lo mejor es un final que te hiele las venas, y en este sentido se cumple. ¿Que esperábamos que la guerra final fuese entorno al Muro? Pues nos quedaremos con las ganas, porque a lomos del Viserion de hielo el Rey de la Noche destroza una parte de la construcción más imponente de Poniente, una escena que, pese a sus cinco o siete minutos, puede resultar muy breve para la importancia que tiene (de nuevo este amigo mío se esperaba una batalla más épica antes de que lograran cruzar. He acabado dándole la razón en eso, no tanto por la batalla como por el drama, que es mínimo, igual que con la muerte de Viserion). Teniendo en cuenta la velocidad con la que se han desarrollado los acontecimientos en estos capítulos, para la temporada ocho no espero otra cosa que al principio ya estén con la guerra en Invernalia, porque si un caballo puede cruzar Poniente en un capítulo, un dragón seguro que puede arrasar con todo en minutos. Hasta aquí lo mejor. ¿Y en cuanto a las pegas? A mí me habría gustado más drama en el derrumbamiento del Muro, y más muertes al principio, un poco más de tensión, dado que la sorpresa no ha sido como en otros finales y lo cierto es que este tampoco me ha dejado demasiado hirviendo, quiero decir, exaltada al cien por cien. Claro que me emocioné cuando lo vi (como digo, me quedé de madrugada, es la primera vez que hago eso, y este episodio remontó la temporada para mí gracias a sus continuos mazazos emocionales), pero no sé si será cosa de los caminantes que no puedo evitar pensar que a nivel general este principio del fin ha decaído con respecto a la trayectoria pasada. Como digo, el gran error de esta temporada ha sido el forzamiento de acciones y el happy flower. Creo que no habría pasado nada por que hubiesen muerto dos o tres importantes más (aparte de Meñique). Eso reduce el número para el gran final, del que ya han dicho que va a ser un "baño de sangre" (menos mal. Si sobreviviesen todos esto no sería Juego de Tronos). En la season 7 me he cagado muy poco en los muertos de los guionistas, así que espero quedarme a gusto en la octava (aunque suene contradictorio).
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