Post de Naiara Salinas Pese a haberme propuesto publicar esta crítica antes, he necesito toda una tarde para digerir las casi tres horas (dos horas y veintinueve minutos en concreto) de metraje que ha convertido la tercera entrega de Los Vengadores en, más que posiblemente, la mejor de todo el Universo Cinemático de Marvel. Y es que si hay algo que destacar frente a otras películas de la Casa de las Ideas es su enorme expansión, una apuesta que ya se sintió grande con la primera parte allá por el 2012... y que ahora ha hecho BUM al unir varias dimensiones y albergando la mayor reunión de superhéroes en una pantalla de la historia. ¿Que la promoción se ha excedido en contenido y noticias para elevar el hype? Un poquito. ¿Que cumple con la mayoría de las expectativas? También. ¿Que es la mejor peli del año? Yo no me aventuraría a llegar tan lejos, pues incluso con su notaza en el IMDB (9,2) se le puede achacar ciertas faltas. No graves, eso sí, pero bastantes como para que el filme simplemente roce la perfección... sin alcanzarla. Pero vamos un poco al detalle (cuelgo aquí el cartelito de SPOILER ALERT porque, como muchos me habéis indicado por Twitter, preferís que analicemos lo mejor y lo peor). Un brindis por el equilibrio Cuando tienes que meter dos superequipos y muchos personajes sueltos en un largometraje que no alcanza las tres horas, y además debes asegurarte de desarrollar al buen villano que tan gentilmente llevas prometiendo durante seis años, lo normal es cagarla, que los minutos de un personaje se excedan sobre los de otros, que algunas escenas sean recortadas sin remedio y quede algún sinsentido como la escena de Thor en la cueva de La era de Ultrón. Pero si algo bueno tienen los hermanos Russo es su arte bien metido en la cabeza para recrear guerras. Que si H.Y.D.R.A. vs S.H.I.E.L.D., que si Capitán América contra Iron Man... A lo que voy es a que tienen muy en mente el tipo de estructura que sabe contar una historia con la acción, el dramatismo y el humor justos. Gracias a esa habilidad han convertido Infinity War en la más completa de todas las historias marvelitas. Hasta entonces hemos estado acostumbrándonos a la vida superheroica de cada uno de estos individuos, viéndoles desarrollarse como tal y cómo un tipo con el rostro morado les acechaba desde la distancia. Pero llega un momento en que se pierde la paciencia y se actúa, así que cuando hablamos de la mayor guerra del UCM no hay que escatimar en tiempo y tenemos dramatismo y acción desde la primera escena, con uno de los genocidios más impactantes que convierte a los asgardianos en los kryptonianos de Marvel. Como decía, la guerra ha comenzado y no es momento de ponerse tontos, pero también es verdad que las vidas de otros continúan en la Tierra y solo el fandom y los supervivientes del primer ataque saben de la existencia de Thanos (pero solo el fandom ha visto al morado prepararlo todo a conciencia). Por eso en el primer acto percibimos el shock de nuestros héroes ante tal amenaza. Si alguien puede tomar las riendas ese es Stephen Strange, quien se toma el deber muy seriamente, pero hasta él es humano. No obstante, retomando la idea del equilibrio, algo que han hecho muy bien los Russo es congregar a los personajes de otros directores, de otras sagas, y mantenerlos en su línea pero amoldándolos a los acontecimientos. Podría decirse que cada héroe aporta algo a este filme: el cinismo, la seriedad y el misterio los tenemos de la mano de Doctor Strange; la inocencia y la aventura, en Peter Parker; el valor, la nobleza y el heroísmo, en Capitán América y colegas; el amor, en Visión y Wanda (en segundo plano tenemos a Tony y Pepper y en tercero a Natasha y Bruce); la venganza, en Thor y la comicidad, en los Guardianes de la Galaxia. Con estos ingredientes, la elaboración del montaje resulta muy importante para que nada se desfase. Sabemos que estamos en Disney, pero la guerra es dura en cualquier tiempo y en cualquier compañía, por lo que a lo mejor no podemos descojonarnos al mismo nivel que en Thor Ragnarok, pero con unos personajes como los Guardianes tampoco vamos a estar temblando todo el rato en el asiento. Relacionado con esto, los saltos de un grupo a otro (muy acertada la división también), de un espacio a otro, son excelentes, cuatro o cinco líneas argumentales que se van fusionando poco a poco y causan que el ritmo se mantenga y no tengas tiempo de aburrirte. Thanos, el mejor villano del UCM Y más vale, porque han tenido, como apuntaba arriba, seis años para prepararlo. Lo hemos visto de espaldas, de perfil y ya conforme se acercaba el momento han ido recortando en silueta y nos han plantado su hermosa e imponente cara en la pantalla. Un proceso de presentación muy chulo que culmina con esta entrega, donde ya no vemos a un cazador que acecha, sino a uno que golpea con todo su poder y astucia. Pero, más aún, empezamos a entender sus motivaciones y que, bajo esa máscara morada fría destroyer total, se esconde un ser con alma que desea purgar el mundo del mal a lo Dios, solo que en lugar de salvar a unos pocos con un arca es más radical y lo formatea por completo (un momento, ¿seguro? Luego volveré sobre ello, no os preocupéis). Thanos es la mejor parte del filme de lejos, el ser más complejo de este universo, un rasgo en el que los Russo han procurado incidir muy bien. Cuando en otros personajes vemos lo básico, en Thanos tenemos todo un fondo detrás, y lo que nos queda por ver de él. Es el loco genocida con un propósito orientado al bien común. Es el sufridor ecologista que podría llevarse genial con Greenpeace si les diera una oportunidad. Thanos machaca y nos hace odiarle y temerle, pero luego demuestra verdadero amor por su hija Gamora y se nos estremece el corazón. Lo vemos humano, pero es un titán, un Cronos del siglo XXI con mucho más amor por sus hijos y por la vida de lo que la mayoría piensa, aunque mate sin escrúpulos. Tengo la impresión de que es el villano mejor construido del UCM, más inteligente, profundo y badass que Loki, quien podía ostentar el título hasta ahora (y he ahí la gracia e ironía cuando, MÁXIMO SPOILER, lo mata a los cinco minutos de empezar la peli. Es como si los Russo nos mandaran un mensaje indirecto: "Sí, hemos destronado a vuestro favorito. Ahora vais a tener que apoyar a Thanos porque claramente es mucho mejor"). No me extraña que derrotar a este tipo vaya a causar pérdidas muy drásticas. No espero menos. Ya nos han demostrado todo de lo que es capaz; que el final fuese súper feliz me decepcionaría enormemente. Alguien así merece acabar con dignidad dejando muertes insalvables, dejando un final agridulce. Pero... Es difícil satisfacer a todo el mundo y cumplir con todo lo que las promociones y las palabras de los actores prometían. Antes hablaba de equilibrio en la posición de elementos y lo mantengo, pero eso no quita para que haya habido partes poco cuidadas, en especial en lo referente a las relaciones amorosas. En esta película tenemos tres, y podríamos tener cuatro si tan solo le hicieran un poco más de caso a la agente 13, Sharon Carter. Wanda y Visión roban el show en este sentido, pero incluso su relación está falta de profundidad. Los hemos visto conocerse e interactuar como amigos, pero ¿de dónde viene el amor, en realidad? De la "civil" a la "infinita" guerra hay un salto de tiempo de dos años, muy grande, que afecta a la relación y claramente lo que tenían en una trama es distinto a la de otra. Me hubiera gustado ver cómo evolucionaba eso a lo largo del UCM, solo digo eso. En cuanto a Bruce y Natasha, pareja rara donde las haya (yo sigo siendo fiel a Clintasha, lo siento), no nos dejan más que un minuto de reacción cuando ambos actores habían comentado que el momento era muy emocionante. ¿Simple etiqueta comercial o, dado que ambos seguían vivos al final, los veremos dialogar sobre lo suyo en la cuarta parte? Sea como fuere, sería muy feo dejarlo tal cual después de todo lo que vivieron en La era de Ultrón. Una cosa es que el tiempo haya enfriado el asunto y otra que quede una conversación pendiente. En cuanto a Tony y Pepper, la mujer no puede tener más disgustos, pero parece que los guionistas todavía abogan por su futuro con Stark, dado que lo mantienen vivo, y quizá por este lado sí veamos una realización mejor... al haber salido ya el tema "bebé" (y sería muy bonito, pero me apena que solo Tony, por ser quien es, tenga ese protagonismo. Todas las parejas merecen su tiempo de desarrollo. Entiendo que con Thanos, las gemas y la reunión de toda esa gente para la guerra haya poco tiempo, pero, eh, no me jodas, que cuando Voldemort regresó y Dumbledore murió a Harry, Ron y Hermione todavía se les revolucionaban las hormonas). Otro fallo que le veo es la estupidez forzada de ciertos personajes que, imagino, en otras circunstancias no hubieran actuado como actúan aquí. Y me refiero a Loki, Star Lord y, por mucho que me pese, Doctor Strange (MÁXIMOS SPOILERS EN ESTE EPÍGRAFE). Veamos, hay muertes épicas y dramáticas y muertes idiotas. Esta peli no se libra de un par de estas, la verdad, y la primera es la más estúpida de todas, porque... ¿a quién se le ocurre vender su lealtad a un malvado asesino cuya fuerza acaba de presenciar diciéndole algo tan POCO sutil como "Hola, soy el dios del engaño. Te ofrezco mis servicios aunque pueda matarte en cualquier momento"? ¿Estamos tontos o qué? Ya estaba decepcionada con el cambio de Loki desde Thor Ragnarok e Infinity War solo continúa con la idiotización de un personaje que antiguamente tenía la cabeza muy fría y preparada para afrontar estos problemas con astucia ladina. Parece hecho aposta para eliminarlo enseguida sin complicaciones. Queridos Russo: si queríais cargaros al personaje había formas más chulas de hacerlo. Su muerte fingida en El mundo oscuro fue mucho mejor. En cuanto al señor Quill, vale, sabemos que es cómico y algo impulsivo, pasando alguna que otra vez por cortito, aunque al menos tiene la decencia de cumplir (tarde, por desgracia) con su promesa a Gamora. Aun así, el arrebato que tiene contra Thanos y que perjudica a todo el grupo, que ya prácticamente estaba a punto de quitarle el guantelete, es, cuanto menos, la clásica reacción del enamorado que se somete al primer impulso y al que le debemos la segunda parte de esta guerra. Él solo es un idiota enamorado. Podemos perdonarle después, pero desde luego no en ese momento. Y Doctor Strange es idiota pero sabio, pese a todo. Es decir, él ha visto el futuro y conoce mejor que nadie los pasos que hay que seguir para que esa única posibilidad entre catorce mil se haga realidad. Por eso, aunque toma decisiones estúpidas (como la de no aprovechar la gema del tiempo en su momento cuando no tuvo ningún reparo en hacerlo con Dormamu, que hasta Thanos le hace un "zas en toda la boca"), seguimos confiando en él y esperamos que sepa lo que se hace. No obstante, al principio de la película lo vemos chocar mucho con Tony (lucha de egos) y parece que parte de su orgullo es lo que lo lleva a ser capturado. El orgullo puede ser tu peor enemigo cuando estás en guerra: te hará tomar decisiones estúpidas únicamente con el ánimo de demostrar que eres mejor que todos, y que eso le pase también al Doc después de todo lo vivido en su cinta individual decepciona un poco. Una vez revisado todo, concluyo:
0 Comentarios
Dejar una respuesta. |
El diálogo cinéfilo de la semanaRuido de fondo
Jack: La sorpresa es infinita. Siento lástima por nosotros y por el extraño papel que desempeñamos en nuestras catástrofes, pero, a partir de un persistente sentido de ruina a gran escala, seguimos inventando la esperanza y aquí es donde esperamos: juntos. Acceso a Calendario CinéfiloArchivos
Agosto 2023
![]() All Screens by All Screens is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 4.0 Internacional License. Creado a partir de la obra en http://allscreens.weebly.com. Puede hallar permisos más allá de los concedidos con esta licencia en http://allscreens.weebly.com |