¡Hola, colegas! Por fin he regresado a All Cinema, bieeeeen. Este post debería haber sido publicado hace tiempo, porque no es como si en todo agosto y septiembre no hubiera ido un solo día al cine, aunque bien es verdad que por temas monetarios y de tiempo mi visita a las salas se ha reducido considerablemente. 
Aun así, tras el follón del FesTVal más la Semana Seriéfila, por fin he sacado tiempo para subir resumidamente mis impresiones de todo lo que he visto hasta ahora, como ya realicé con los estrenos de julio. Tal vez a estas alturas no interese mucho, pero voy a lanzarme a la piscina.

El rey Arturo: la leyenda de Excalibur (fecha de visualiación: 15 de agosto)

Mucho se dijo sobre esta película en su día, sobre todo negativamente. A mí, que siempre he sido una apasionada del mito artúrico, no me pareció que fuera para tanto. Hay rasgos que la sitúan muy dentro de lo que podría considerarse "la marca Ritchie", que ya se ha visto en producciones como Sherlock Holmes (ese ritmo desenfrenado en ciertas escenas, más la música rockera, la cámara lenta en las peleas y el sistema de planificación de los personajes son solo algunos ejemplos), y bien es verdad que hay mucha libre interpretación de la leyenda, pero pienso que esa es parte de la gracia de estos textos, que, al no ser tan históricos (si consideramos que la historia cuenta eventos documentados y por ende reales), pueden permitirse pasajes nuevos o puntos de vista diferentes. El rey Arturo ha dado un sinfín de obras literarias, cinematográficas y televisivas. No considero esta la mejor adaptación (y no solo por sus invenciones o incluso libertades históricas), pero su gracia tiene. 
Los personajes son muy prototípicos de esta clase de películas (el grupo de Arturo me recordó bastante al del Robin Hood de Ridley Scott) y el efecto sorpresa no está muy logrado, aunque si hubiera que destacar un rasgo sería el humor, que es uno de los aspectos que salva la cinta. El humor y ciertos pasajes, como la espada Excalibur (protagonista indiscutible) y el momento en el que Arturo realiza su viaje espiritual. Creo que el filme goza también de la epicidad suficiente para que al menos resulte atractivo desde un punto de vista estético. 
Charlie Hunnam aporta un héroe bruto a la vez que humilde y sarcástico. Como líder tiene madera. Jude Law resulta un villano elegante y con toques muy del príncipe Juan (sí, Robin Hood es un referente muy recurrente en mis comparaciones). La aportación de Astrid Berges-Frisbey como Ginebra, cuya identidad se mantiene por el momento oculta aunque la sepamos, me gustó bastante en su día, como sierva de un Merlín al que todavía no hemos tenido el gusto de conocer (y quizá ese misterio sea un punto fuerte de cara a las secuelas). Su toque de rebeldía y en cierto modo de guerrera causan que se recuerde a Keira Knightley, quien ejerció el mismo papel en la cinta protagonizada por Clive Owen. 
En resumen: las comparaciones son odiosas, pero con una historia tan adaptada como esta son inevitables, y en su caso diría que pierde, aunque no por ello merece tantos ceros como le dedicaron, sobre todo por su apuesta modernista, humorística y rocambolesca. No hay que olvidar que es la primera de una saga, así que no se puede esperar que sea tampoco la mejor. Habrá que ver cómo evoluciona..., si es que lo hace.  

Valerian y la ciudad de los mil planetas (fecha de visualización: 22 de agosto)

Otra película que no tuvo el éxito esperado, cosa que no logro comprender, ya que a mí no solo me pareció muy entretenida, sino también algo original en su concepción. No por la trama, sino por la creación del universo, que a su vez es el peligro, es decir, vale que se tenga un presupuesto muy acaudalado, pero o tienes una buena historia detrás o de poco sirve. En este caso creo que ambos aspectos se solapaban bien, es decir, la idea de que una raza supuestamente extinta conspirase de forma pacífica para restaurar su planeta y su orden era llamativa, y el escenario muy chulo. No sé qué ha podido fallar con certeza, así que me decanto por la teoría de la expectación: hasta entonces los trailers habían sido espectaculares y estoy muy segura de que la gente esperaba un largometraje rollo Avatar. El problema es que, a pesar del presupuesto elevado, la cosa acaba siendo muy nimia en comparación, o tal vez los fans del cómic no quedaron satisfechos con la adaptación. Ni idea.
Yo la disfruté mucho. Tal vez lo que me puso más nerviosa fue la relación de tira y afloja entre los protagonistas, el hecho de que aun estando en mitad de una misión Valerian se dedicara a flirtear como un idiota, pero tampoco es un rasgo con el que esté muy en contra. Cara Deleveigne, que tiene menos experiencia en actuación, no me defraudó tampoco, así que me quedo con esa química que llega a irritar hasta el punto de sugerirle a la chica que se busque a otro mozo mejor (como digo, esto es solo mi opinión). 
En resumen: una explosión de efectos especiales, tecnológicamente muy chula, que deja el argumento un poco atrás en comparación. Por una parte entiendo este exhibicionismo, ya que cuando se trata de imágenes se espera mucha belleza, pero al final la gente acude a las salas esperando ver una historia llamativa y que, mínimo, emocione, cosa que este filme no ha trabajado muy bien pese a que la trama tampoco está mal (el atractivo lo tiene. Lo que falta es explotarlo). El reparto tampoco se luce mucho. No es Avatar, desde luego, ni La guerra de las galaxias, pero cumple con la función de entretener y yo la recomendaría. El principio es muy bueno y eficaz. El final puede que deje más que desear.

El otro guardaespaldas (fecha de visualización: 29 de agosto)

Para mí la mejor de todas las que incluyo en esta lista, lo digo desde ya. Divertida, un humor muy gamberro y escenas muy hardcore que logran que funcione y salgas de la sala con una sonrisa. Su tono paródico y la química entre los protagonistas logran mantenerte en el asiento y que te descojones cada dos por tres. 
Ryan Reynolds se ha vuelto todo un cómico desde Deadpool, pero me alegra ver que Samuel L. Jackson no se queda atrás (convivir con Marvel una temporada es lo que tiene). Uno hasta podría pensar que esto lo ha dirigido Matthew Vaughn (palabras para Kingsman: el círculo dorado también hay), pero no. 
Este filme trata de ser todo lo contrario que fue la mítica El guardaespaldas, situando a dos rivales en el mismo equipo. Cuando eres un hombre de ley, no es lo mismo proteger a una superestrella que a un criminal, pero cuando resulta que el criminal es crucial para acabar con la tiranía de un dictador (otro criminal peor)... no hay otra que aceptar el cargo. Con esta premisa también se traslada al guion un tema que preocupa mucho a día de hoy: la corrupción política, así como la dictadura. Y con ello el dardo no solo es directo, sino que además incide en que a veces los peores criminales no aprietan el gatillo, sino que lo ordenan. Un mensaje que cala a través de un montaje que se cuestiona mucho sobre la moral de los actos, sobre todo cuando nos ponen a un "malo" tan carismático como blanco. Alguien que tiene mujer y se preocupa por su bienestar no puede ser tan malo, ¿no? 
En resumen: perfecta sátira del crimen y gran parodia, no solo de El guardaespaldas, sino también de otras películas del género. Reynolds y Jackson forman una pareja encantadora y graciosa. El tono es el adecuado para transmitir el mensaje, que no por ser comedia hay menos seriedad, sobre todo cuanto más se llega al final. 

Death Note (fecha de visualización: 1 de septiembre)

​Otra adaptación polémica. Tenía ganas de establecer una comparación con el anime y el manga, pero me da que me voy a quedar con las ganas por el lapsus de tiempo que he dejado pasar. Aun así, quien conozca los productos originales se dará cuenta de la diferencia en calidad. No es que este filme esté del todo mal planteado; es que no termina de llegar a la grandeza del anime, una serie que aportó un protagonista fuerte, potente, y con una moral muy cuestionable. La persecución constante entre Light y L podía equivaler a la de Sherlock y Moriarty: dos grandes mentes en continuo choque. La película de Adam Wingard logra un buen detective, pero un villano muy flojo.
No tengo ninguna queja sobre la ambientación en Norteamérica ni la occidentalización de los actores, como tampoco la tengo sobre algunos cambios de guion. Es decir, aunque acogí estas novedades con recelo, siempre me digo que si la esencia se mantiene el cambio habrá valido la pena. Pero esa esencia se quiebra cuando se transforma el proceder del protagonista. Light, aun siendo un mero estudiante de instituto, siempre ha demostrado una inteligencia sublime. ¿Por qué entonces es dominado por un ente femenino que es quien parece susurrarle al oído todo lo que debe hacer con el cuaderno... y hasta resulta más mala que él? El Light japonés no se cuestionaría su deber en ningún momento, no se dejaría manosear ni por su novia, ni mucho menos parecería inquieto e inseguro casi todo el tiempo. Es como si el zorro hubiera pasado a ser otra cosa, un adolescente que se mete en un juego que no puede dominar. L, por contra, conserva algunas de las excentricidades que hicieron de él muy genial en su día, y está bien llevado por su intérprete (contra el que llegó a haber más quejas que contra Nat Wolff, valga la ironía). La única pequeña pega que le pongo es su desesperación en el último acto, que me parece que no cuadra con el personaje. Por lo demás, me gustó.
Bien es cierto que se percibe un esfuerzo por rescatar lo mejor del anime, pero este no acaba de ser suficiente y opino que la película no condensa bien estos elementos, que falta explotación, más plot twist, más interacción entre L y Light... No digo que tenga que ser exactamente como el anime, pero si algo logró este fue que no permaneciéramos indiferentes ante los diálogos entre los protas, que podrían haber dado más de sí en la cinta. La novia de Light, por su parte, debería haber jugado otro rol. No sé cuál, pero desde luego el que tuvo no me hizo mucha gracia, como si ella acabara muy por encima de Light. Es un romance que podría haber sido más inteligente del que fue, donde los dos acaban actuando como bobos. 
¿Y Ryuk? Fue una de las mejores partes. Willem Dafoe logró capturar la esencia completa de este personaje y sus escenas para mí no tienen muchos errores, aunque para ser un dios de la muerte se le ve muy a merced del chico, cuando en teoría es quien tiene la última palabra sobre el cuaderno. He oído a gente quejarse del disfraz, pero a mí no me pareció malo. Se nota mucho el artificio en ese brillo de ojos antinatural, pero para un mundo donde todo se digitaliza y estos tienen la decencia de crear una máscara como antaño no está mal. 
En resumen: sí, pero no. No la crucifico. Como fan del anime no le llega a la suela del zapato. Como espectadora simple aprueba justa, solo porque le falta chicha. ¿Lo mejor? L, Ryuk y algunos detalles que homenajean el original. Las muertes tampoco están mal, se ajustan al nivel de gore esperado. ¿Lo peor? Light y su chica, más la sensación de que el ambiente es muy inmaduro en el sentido de que hay muchos actos impulsivos y pocos reflexivos (sí, incluso aunque al final se demuestre que todo estaba planeado por Light). Si hay segunda parte, espero que estos errores se corrijan. 

It (fecha de visualización: 16 de septiembre)

Es irónico que decidiera "celebrar" mi cumpleaños viendo una película que en principio me producía repelús, ya que nunca he sido fanática del cine de terror y he visto producciones contadas de este género. Es otra a la que podría haberle dedicado un post aparte, aunque, ahora que lo pienso, ¿qué podría decir de ella para explayarme tanto? Como digo, no sé mucho de este género, así que me ceñiré a lo que he visto.
Lo que se vende como terror puro termina convirtiéndose en una aventura infantil donde hay un payaso terrorífico de por medio. Verla en casa no es lo mismo que en el cine; el impacto no es tan elevado. Tal vez por eso sobreviví al visionado, ya que los sustos son varios y se introducen convenientemente cuando te los esperas y cuando no. Pero me había visto tantos avances y clips que creo que para cuando le di al play estaba ya anestesiada (otro punto a favor). Con todo, he de decir que me convenció mucho, tanto por la historia como por la realización. It tiene un aspecto muy positivo y es que no es un mero cuento de terror para asustar al público, sino que entremezcla aventuras, rivalidades y un sentimiento de unión en el grupo denominado como los Perdedores. Los tejemanejes de estos chicos me recordaron a los de Los Goonies, y el sufrimiento del bullying que padecen hace que puedas sentirte identificado. Por supuesto, tratándose de una obra de Stephen King, la cosa no se limita a simples empujones e insultos, sino que hay armas blancas de por medio, amenazas de muerte, etc., etc. No pasa nada, sigue siendo una historia de terror, no esperaba menos. Reservándose algún momento cómico, la peli trata también temas como el abuso infantil y el racismo, que elevan el interés y, por qué no decirlo, la madurez. 
Es una buena reflexión sobre la psicología del miedo, de cómo este nos afecta y cuál es la diferencia entre el miedo de un niño y el de un adulto. Sin ir más lejos, este remake fue mi primera experiencia con el personaje de Pennywise, "Eso", y cuando vi de qué se trataba me vino a la cabeza la palabra "boggart". Exacto, ese bicho del mundo de Harry Potter que adquiere la forma de lo que más temes. Este payaso es lo mismo, y los niños deben encontrar un modo de hacerle frente, es decir, hacer frente a sus miedos, lanzar su Riddikulus. Es terror con mucha profundidad, y el reparto es estupendo, el cómo interactúa y va acrecentando poco a poco la unión contra un enemigo común. Aplausos para el joven Bill Skarsgard, que nadie pensaría que está bajo la máscara de Pennywise. Un actor que capta al personaje de una forma espeluznante y luego te sonríe adorablemente da qué pensar.
En resumen: para ser de terror es bastante completa y no muy cliché. Cumple con las expectativas y hasta, a nivel de actuación, las sobrepasa. Muy recomendable en general, incluso a los detractores (como menda). Yo me he hecho fan y creo que estoy preparada para ver la secuela... en cines esta vez. Es más, me ha picado la curiosidad por la novela. 

Esto es todo por ahora. Regresaré muy pronto para hablar de Kingsman 2 y recomendar un nuevo filme, así que ¡estad atentos!

¿Alguna vez os habéis ido de Erasmus? ¿AuPair? ¿Tenéis familia que vive en el extranjero? ¿Creéis que no tenéis ninguna oportunidad en vuestro país y deseáis marcharos? Entonces os traigo la película perfecta para desahogaros:

Eilis Lacey, harta de no encontrar empleo en su tierra, Irlanda, toma la dura decisión de emigrar a Nueva York, donde se instala en una pensión de Brooklyn y poco a poco va consiguiendo un futuro, en especial cuando conoce a Toni, un italo-estadounidense con el que vive un romance muy tierno. Sin embargo, cuando la nostalgia ha quedado atrás y Eilis empieza a encontrar un hogar en América, circunstancias personales la llevarán de vuelta a casa, y allí deberá decidir dónde está su corazón de verdad.  

Bien, de acuerdo, lo más lejos que he estado de casa han sido unas cuatro provincias de distancia, pero como persona que ha pasado mucho tiempo lejos de los suyos sin mucho dinero para movilidad me es sencillo ponerme en la piel de la protagonista. Dramáticamente, la cinta cumple con los parámetros de este viaje "obligatorio", que no solo cambia la vida de Eilis sino también a ella, lo cual ejemplifica el dicho de "hay que abandonar el nido más a menudo". 
En Irlanda Eilis no se exprime a sí misma, cobijada bajo el ala maternal; por eso a la gente le cuesta darle una oportunidad. Cuando cambia de aires enseguida se obliga a espabilar para poder comer. La distancia le otorga independencia y la independencia la vuelve mujer. Dicen que de todo es posible aprender una lección y Eilis bebe de cada ayuda que le ofrecen, pues aunque su gente está a un océano, no está sola en la gran ciudad y cuenta con amigos y compañeras que le aportarán cosas, sean muy pocas o muchas. La película, así, se convierte en un consejo general sobre la madurez y el hogar. Hay veces en las que marcharse es conveniente, para abrir la mente, para conocer mundo, para vivir..., para aprender. Y sí, los comienzos serán penosos, pero el renacer es lo que cuenta. 
Esto me lleva a considerar una estructura de dos partes: en la primera asistimos a esta evolución en la chica, el cómo se recupera de la nostalgia y empieza a hincar codos, cómo cambia su relación con el entorno y cómo empieza a tomar la oportunidad que se le ha dado y a luchar por sus sueños. Y la segunda es como si ocurriera mucho más tiempo después (es lo que tiene la elipsis), donde podemos ver el fruto de ese esfuerzo y ese viaje. En su pueblo irlandés Eilis no tenía mucho, pero fuera se abrió camino y consiguió lo que le faltaba, tanto de carácter como de formación. Sería muy gratificante ver cómo eso le repercute al regresar..., si no fuera por la historia de amor, que, aunque no la haya mencionado mucho hasta ahora, es clave de este proceso. Pues otro de los pasos de la madurez es conocer gente, experimentar nuevos sentimientos, tomar decisiones aún más complejas... Gracias al amor Eilis se "engancha" a Brooklyn, pero parte de su ser todavía reside en casa. Tal y como ella le confiesa a su hermana por carta, aunque su cuerpo estuviera allá, su vida aún estaba en la isla, aunque había pasado a encontrarse varada en medio del océano, es decir, entre sus dos hogares. El filme transmite muy bien esa sensación de estar cada dos por tres en una encrucijada, de no saber qué hacer. Eso es más verosímil que si la joven decidiera luchar todo el rato por su relación con Toni (lo cual, si me lo permitís, también la haría muy... cursi). Justo cuando la pareja no puede ser más feliz llegan las malas noticias y, como espectadores enamorados, no podemos sino observar con recelo a la gente que intenta que Eilis permanezca en Irlanda, logrando que incluso su decisión de volver con Toni se debilite. Otro de los aspectos mejor llevados en el guion es la incertidumbre mediante el engaño, es decir, realmente Eilis no vuelve a Irlanda hasta el tercer acto, que no supone más que la última media hora de la peli. Es decir, todo lo que ahí ocurre es rápido y/o repentino como la vida misma y la obliga a cambiar de planes, y tal y como pasa uno no se espera la decisión final. Y eso para reflejar el quebradero de cabeza de la protagonista, lo cual me parece maravilloso. 

En resumen: una buena historia, muy real, que además te muestra conexiones culturales entre ambos países. El reparto es estupendo (siempre haré hincapié en lo mucho que ha evolucionado Saoirse Ronan), la relación entre Toni y Eilis muy tierna y la realización es ideal. Me gusta que se reconociera el trabajo con una nominación a los Oscar. 

Ficha técnica
Brooklyn (Brooklyn)
2015, Reino Unido
Director: John Crowley
Reparto: Saoirse Ronan, Domhnall Gleeson, Emory Cohen, Jim Broadbent, Julie Walters y Emily Bett Rickards

Puntuación: 10/10

La película de la que os hablo esta semana es una de esas cuyo recuerdo viene asociado a un momento importante de mi vida cinéfila: cuando conocí con mi compañera Rose a Hugh Jackman en el Festival de San Sebastián, allá por 2013.

Prisioneros es un thriller que aborda la desaparición de dos niñas, hijas de los Dover y los Birch. Cuando el detective David Loki (sí, como el hermano de Thor) investiga el caso sin hallar un culpable muy claro, el patriarca de los Dover, Keller, decide tomarse la justicia por su mano y secuestrar al principal sospechoso para que le revele el paradero de las niñas. El caso se complica cuando aparecen pruebas de otros secuestros en diferentes lugares. 

El filme cuenta con el apoyo de grandes rostros, con Hugh Jackman y Jake Gyllenhall a la cabeza (otros nombres: Viola Davis, Paul Dano, Maria Bello y Terrence Howard). Lo mejor es la forma en que la trama se va complicando y adquiere tintes hasta mitológicos, con el laberinto como símbolo principal, porque eso de hecho es lo que acaban cruzando los protagonistas (metafóricamente hablando) para resolver el caso. 
Dicho de otro modo, el guion es un camino recto en el que de pronto surgen desvíos que despistan y confunden al que lo cruza. Algunos de ellos son un círculo que les devuelve al principio y otros contienen incluso más desviaciones, pero si eligen la correcta al final llegarán al mismo final al que podrían haber llegado de seguir el camino principal. Esa es la sensación con la que puede acabar quien vea esta cinta, o al menos es la que tienen los dos justicieros en cuestión, David y Keller, quienes representan dos tipos de justicia: la que sigue la ley a pies juntillas y la que cree que el fin justifica los medios. Llega un momento en que ninguno de los dos es eficiente actuando por su cuenta, pero únicamente el espectador se dará cuenta al principio de la importancia que tienen ambos estilos y formas de realizar las cosas, es decir, la necesidad de esta complementación. 
En Prisioneros todos los personajes tienen doble cara y todo está construido para engañar. Un buen ejemplo es el personaje de Paul Dano, un chico llamado Alex que posee una discapacidad y es el sospechoso número uno. Loki lo deja ir porque no puede demostrar que sea culpable, pero Keller no opina lo mismo y está seguro de que el chico solo se apoya en su enfermedad para pasar desapercibido. Se abre un debate ético-moral sobre cuál es el límite de la justicia, ya que Keller, intentando salvar a las chicas, se convierte en un criminal, aunque nadie lo llame de esa forma (es por el cómo actúa, principalmente). 
En cuanto a la realización, veréis que apenas hay banda sonora y que todo es muy sonido de ambiente, lo cual acentúa la tensión y, por otro lado, causa que los actores se luzcan más en las escenas fuertes. 

En resumen: creo que es un suspense muy bien llevado y que logra enganchar, pese a que no soy muy fanática del género. La evolución psicológica de los personajes "buenos" es llamativa y degradante, mientras que los "malos" van adquiriendo lo que consideraríamos... alma. La interpretación es muy buena. Es una obra muy sencilla que no te deja indiferente. 

Ficha técnica
Prisioneros (Prisoners)
2013, USA
Director: Denis Villeneuve
Reparto: Hugh Jackman, Jake Gyllenhall, Maria Bello, Viola Davis, Terrence Howard, Paul Dano y Melissa Leo

Puntuación: 7,5/10

¡Hola de nuevo, amigos! ¿Ha sido una tarde entretenida? ¡Espero que sí! Aquí tenéis la lista de ganadores de esta segunda edición de nuestros Emmys dedicados al cine. ¡Dentro de poco será el de series!

CATEGORÍAS BÁSICAS

Mejor película: Captain Fantastic
Mejor productora: Avalon
Mejor director: Nacho Vigalondo (Colossal)
Mejor actor: Viggo Mortensen (Captain Fantastic)
Mejor actriz: Isabelle Huppert (Elle)
Mejor actor de reparto: Lucas Hedges (Manchester frente al mar)
Mejor actriz de reparto: Rooney Mara (Lion)
Mejor actor/actriz revelación (con ACCÉSIT): Sunny Pawar (Lion) y Dafne Keen (Logan)
Mejor actor/actriz de doblaje (con accésit): Michelle Jenner e Iván Muelas
Mejor guion original y adaptado (con accésit): Manchester frente al mar y La llegada

CATEGORÍAS GENÉRICAS

Mejor película de acción: Power Rangers
Mejor drama: Personal Shopper
Mejor comedia/musical: La alta sociedad
Mejor película de animación: Your Name
Mejor thriller/terror: Crudo
Mejor película europea/latinoamericana: Toni Erdmann
Mejor película española: El bar
Mejor cortometraje/fan movie: Timecode
Mejor franquicia: Universo DC

CATEGORÍAS ORIGINALES Y/O TÉCNICAS

Mejor escena: Aprendiendo a usar los poderes (Power Rangers)
Mejor principio y final: La La Land
Mejores efectos especiales: Power Rangers
Mejor vestuario y maquillaje: La La Land
Mejor ambientación: Silencio
Mejor BSO: Sing Street
Mejor canción original: "City of Stars" (La La Land)
Mejor número musical: "Another Day of Sun" (La La Land)
Mejor personaje: Saroo Brierly (Lion)
Mejor romance: Cosmo y Raphina (Sing Street)
Mejor bromance/sisterromance: la banda de Cosmo (Sing Street)
Mejor química en pantalla: Casey Affleck y Lucas Hedges 
Mejor reparto: El bar
Mejor Hot Guy: Zac Efron
Mejor Hot Girl: Rooney Mara
Mejor héroe: Los Power Rangers
Mejor villano: Rita Repulsa
Mejor diálogo: El indomable Will Hunting
Mejor trailer: Valerian y la ciudad de los mil planetas
Película más esperada: Valerian y la ciudad de los mil planetas
Mejor recomendación cinéfila de la semana: Orígenes
Mejor blog/cuenta de cine: @Amaras_cine