Post de Naiara Salinas La película de la que os hablo esta semana es una de esas cuyo recuerdo viene asociado a un momento importante de mi vida cinéfila: cuando conocí con mi compañera Rose a Hugh Jackman en el Festival de San Sebastián, allá por 2013. Prisioneros es un thriller que aborda la desaparición de dos niñas, hijas de los Dover y los Birch. Cuando el detective David Loki (sí, como el hermano de Thor) investiga el caso sin hallar un culpable muy claro, el patriarca de los Dover, Keller, decide tomarse la justicia por su mano y secuestrar al principal sospechoso para que le revele el paradero de las niñas. El caso se complica cuando aparecen pruebas de otros secuestros en diferentes lugares. El filme cuenta con el apoyo de grandes rostros, con Hugh Jackman y Jake Gyllenhall a la cabeza (otros nombres: Viola Davis, Paul Dano, Maria Bello y Terrence Howard). Lo mejor es la forma en que la trama se va complicando y adquiere tintes hasta mitológicos, con el laberinto como símbolo principal, porque eso de hecho es lo que acaban cruzando los protagonistas (metafóricamente hablando) para resolver el caso. Dicho de otro modo, el guion es un camino recto en el que de pronto surgen desvíos que despistan y confunden al que lo cruza. Algunos de ellos son un círculo que les devuelve al principio y otros contienen incluso más desviaciones, pero si eligen la correcta al final llegarán al mismo final al que podrían haber llegado de seguir el camino principal. Esa es la sensación con la que puede acabar quien vea esta cinta, o al menos es la que tienen los dos justicieros en cuestión, David y Keller, quienes representan dos tipos de justicia: la que sigue la ley a pies juntillas y la que cree que el fin justifica los medios. Llega un momento en que ninguno de los dos es eficiente actuando por su cuenta, pero únicamente el espectador se dará cuenta al principio de la importancia que tienen ambos estilos y formas de realizar las cosas, es decir, la necesidad de esta complementación. En Prisioneros todos los personajes tienen doble cara y todo está construido para engañar. Un buen ejemplo es el personaje de Paul Dano, un chico llamado Alex que posee una discapacidad y es el sospechoso número uno. Loki lo deja ir porque no puede demostrar que sea culpable, pero Keller no opina lo mismo y está seguro de que el chico solo se apoya en su enfermedad para pasar desapercibido. Se abre un debate ético-moral sobre cuál es el límite de la justicia, ya que Keller, intentando salvar a las chicas, se convierte en un criminal, aunque nadie lo llame de esa forma (es por el cómo actúa, principalmente). En cuanto a la realización, veréis que apenas hay banda sonora y que todo es muy sonido de ambiente, lo cual acentúa la tensión y, por otro lado, causa que los actores se luzcan más en las escenas fuertes. En resumen: creo que es un suspense muy bien llevado y que logra enganchar, pese a que no soy muy fanática del género. La evolución psicológica de los personajes "buenos" es llamativa y degradante, mientras que los "malos" van adquiriendo lo que consideraríamos... alma. La interpretación es muy buena. Es una obra muy sencilla que no te deja indiferente. Ficha técnica Prisioneros (Prisoners) 2013, USA Director: Denis Villeneuve Reparto: Hugh Jackman, Jake Gyllenhall, Maria Bello, Viola Davis, Terrence Howard, Paul Dano y Melissa Leo Puntuación: 7,5/10
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Agosto 2023
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