Sanfermines cinéfilos

Post de Naiara Salinas

¡Gora San Fermín! Aunque estas fiestas te absorben el alma en cuanto decides vivirlas (bien lo sé), he sacado algo de tiempo para publicar este post, siguiendo la tradición de los sábados cinéfilos (y eso que en teoría el horario de verano permite más libertad de fechas, pero bueno).
​Si mi comadre Tessa os habló el pasado miércoles de la presencia de nuestra fiesta nacional en las series, hoy haré lo propio en el cine. Preparad los pañuelos rojos porque el cohete está a punto de sonar...

Fiesta (1957)

Adaptación de la famosa novela de Hemingway, quien disfrutó tanto de los Sanfermines que hoy en día tiene: su habitación de hotel, un monumento junto a la plaza de toros y un café con su nombre (el Rincón de Hemingway. Muy bonito, aunque ojito con el precio). Tanto en el libro como en la película un ex combatiente de la Primera Guerra Mundial, Jake Barnes, que trabaja como periodista, se reencuentra en París con una enfermera suya en el frente y viejo amor, Brett Ashley. En compañía de otros amigos, deciden viajar a la capital navarra para disfrutar del festejo taurino. Allí los líos amorosos proseguirán y pondrán a prueba la amistad de estos individuos.

Carnaval de ladrones: el robo del siglo (1967)

Una locura argumental en la que un americano se hace pasar por un hostelero cuando en realidad es un ladrón que planea un atraco al Banco Nacional (sí, en Pamplona) durante uno de los encierros. En fin… El protagonista hizo de Messala en la clásica Ben-Hur.

Cowboys de ciudad (1991)

Billy Crystal estuvo en Pamplona, señores y señoras. O más bien, estuvo ficticiamente, ya que jamás pisó suelo pamplonica (lástima), aunque corriese delante de toros rodeado de gente de blanco y rojo. Al menos la imagen del ayuntamiento de la ciudad en el momento del chupinazo es real.
¿Y por qué Billy Crystal acaba en Pamplona? No acude solo; va acompañado de sus dos mejores amigos, un tipo atormentado por su mujer y otro que teme que su recién esposa le sea infiel (hombres), con el objetivo de desquitarse un poco del estrés formándose como auténticos vaqueros.
Una comedia que convirtió el encierro en algo más gracioso de lo que se supone, como podéis observar en las siguientes imágenes. Los golpes son brutales y la escena un poco de locos (en la vida real pondríamos el grito en el cielo), pero la música ayuda a aliviar el drama.

Americano (2005)

Joshua Jackson (coprotagonista de Fringe), en cambio, sí estuvo entre pamplonicas unas semanas rodando esta ficción en la que interpreta a Chris, un joven estadounidense que se marcha con otra pareja a los Sanfermines para vivir un poco de aventura y despejarse (un argumento muy recurrente, como véis). En cuanto llega le pierden la maleta, pero eso deja de ser un problema al conocer a Adela, una mujer con la vivirá una historia de amor entre fiesta y siesta. Un buen filme para conocer bien a fondo otras tradiciones de la celebración aparte del encierro, como el Pobre de mí, así como el paisaje navarro que rodea la capital (aunque me da que no solo se rodó en Navarra. ¿Es... la Plaza Mayor de Madrid eso que veo en el trailer? Echadle un vistazo y juzgad).

Noche y día (2010)

Subtítulo de esta: “Cuando los toros se mudaron al sur”. Porque, que yo sepa, Pamplona está en zona norte colindando casi con los Pirineos. Pero supongo que Sevilla es más bonita y mejor escenario para una película que protagonizan Tom Cruise y Cameron Diaz. La localización de estas fiestas es un problema en Norteamérica porque a veces tiende a írseles la olla y situarlas en algún lugar como… México (lo que me remite al post de Tessa donde explica el mismo problema en Cómo conocí a vuestra madre).
En fin, él es un espía que conoce a la rubia durante un vuelo y la involucra en una trama de asesinatos, persecuciones, tiroteos… (sí, a lo Misión imposible pero sin la elegancia de Ethan Hunt y su equipo). Algún gracioso tuvo que decir: “Hey, como esta es una película de acción y encima se encuentran en España, ¿por qué no rodamos una escena con toros como la de aquella famosa historia de Hemingway?” Dicho y hecho, una moto y unos morlacos en el mismo plano. Se agradece el homenaje y la escena no está mal, pero cada vez que la veo con mi padre ambos nos reímos un poco. ​

Solo se vive una vez (2012)

Espero no haber sido la única que haya cantado el estribillo del tema de las Azúcar Moreno (badum tss). 
Hace poco se celebraron los Oscar de Bollywood en Madrid. Aún recuerdo cuando salió un anuncio en el Diario de Navarra que convocaba una prueba de casting para ser extra en esta película donde tres amigos de la India, para volver a estrechar lazos, se embarcan en un viaje por el mundo y aterrizan en España, donde además de correr el encierro (todo el mundo quiere correrlo menos yo) prueban también la clásica tomatina de Buñol, es decir, que lo que cuenta es conocer las tradiciones más emblemáticas del país ibérico.  El resultado: siete premios en los Filmfare, entre ellos el de Mejor Película, Mejor Dirección y Mejor Actor de Reparto. Ah, y superó a Harry Potter y las Reliquias de la Muerte II en taquilla (eso en la India, claro). 
Observad la epicidad de esta escena donde esos amigos pasan de tener miedo a sentirse libres y eufóricos. En idioma original, eso sí (pd: si algún o alguna pamplonica me está leyendo, atentos porque puede que algún conocido salga en la escena).

Blue Lips (2014)

El cartel en blanco y rojo ya la delata. La magia de esta película está en su realización, respaldada por seis actores de distinta nacionalidad y seis directores (algo parecido a lo que hicieron en Siete días en la Habana) que contribuyen a enlazar seis historias diferentes ambientadas en Pamplona, lo que hace de este largometraje el más humano de esta lista. Un relato profundo de experiencias, sentimientos que rinde tributo a la universalidad de la fiesta y que nos habla de relaciones que ayudarán a superar conflictos.